Es evidente de que hay razones de sobra para que en la calle G desde 25 hasta malecón se llene de jóvenes indignados. Montando sus carpas (no se de donde las sacarán), debatiendo, reflexionando, buscando a los culpables de que no tengan futuro en la Cuba de hoy y buscando soluciones; sin embargo, el miedo a que los muelan a palos (léase pancreatitis aguda) les hace o bien quedarse en casa, o bien ir a la misma calle G y entre tragos de una botella de alcohol de farmacia rebajado con agua, abstraerse momentáneamente de su dura realidad.
Teniendo en cuenta de que eso sea difícil que ocurra, giro mi mirada a los españoles residentes en Cuba, y no me refiero a los cubanos/españoles beneficiados con la ley de memoria histórica, me refiero a los “españoles de España” que viven en Cuba por diferentes motivos.
Hemos visto en estos días como en diferentes lugares del mundo españoles indignados protestaban ante sus sedes consulares.
¿Ocurrió una protesta de Españoles indignados en el consulado de la Habana Vieja? NO
¿Por qué? Podría remitirlos directamente al programa de TVE “Españoles por el mundo: Habana” pero les evitaré tal mal trago resumiéndolo aquí.
Simplemente los españoles que residen en Cuba provenientes de España no tienen ni un solo motivo para protestar o indignarse ante su gobierno o representación, componen un escalón por encima de la sociedad donde viven, un privilegio que radica en su nacionalidad. Si en Argentina (por ejemplo) tienen que partirse el lomo para traer un salario como cualquier argentino, en Cuba no les es necesario, son amamantados del régimen, que radican en la isla con pactos previos en sus condiciones de vida.
¿Qué español emigraría a Cuba?...digo más...¿Qué extranjero emigraría a Cuba a luchar “LA JAMA” como cualquier Cubano?.
Por eso hoy por hoy en Cuba no existen indignados, o bien por que no lo están o bien porque no les dejan indignarse, esta última categoría sólo para cubanos.
De momento la única #acampadahabana frente al consulado Español ocurre a diario, colas kilométricas buscando escapar.
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