Anoche a las 00:50h (hora de Canarias) me dispongo a darme otra sesión de automutilación neuronal viendo Cubavision Internacional en el dial 155 del satélite Astra en Europa (me pregunto cuanto pagara el régimen por dicha cobertura.)
A esa hora estaba el tristemente celebre presentador de la Mesa Redonda Randy Alonso leyendo (como no) una reflexión de Fidel Castro sobre las elecciones de Venezuela justificando los resultados del PSV de Chávez.
No pasaron apenas 10 minutos, suena la cabecera del NTV (Noticiero Nacional de Televisión), aparece el bigotudo oficial para leer de nuevo la dichosa reflexión.
Pasan 5 minutos aproximadamente dan 2 noticias intrascendentes sobre una visita de una representante China a Cuba y sobre el aniversario de los CDR y de nuevo aparece el bigotudo oficial con otra reflexión de Fidel Castro esta vez hablando del holocausto nuclear en Japón.
Es decir, en menos de 20 minutos los espectadores se han “zumbado” 2 reflexiones repetidas y otra sobre Japón del mismo autor, el dictador Fidel Castro.
Apague mi televisión y me fui a dormir, en mi cabeza llegaba una pregunta tras otra. ¿Cómo se puede aguantar semejante bombardeo mediático? En Cuba no hay maneras de medir los índices de audiencias pero creo que el cubano ya harto de tanta repetición optaría por apagar
Es la locura de mi país, rayando lo irreal, la ficción, que tristemente se puede tocar y esta ahí mientras nosotros lo permitamos.
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